Indudablemente la mejor decisión que tomó George Lucas al crear Star Wars fue el haber contratado a John Williams.
Asistí el día de ayer a Star Wars in Concert y debo decir que es uno de los espectáculos más sorprendentes y gratificantes que haya presenciado. La mezcla de la Orquesta Sinfónica Star Wars (dirigida por Dirk Brosse y con casi 90 músicos), sus coros, las imágenes de las cintas en pantallas gigantes, los inmensos páneles LED, la narración del carismático y talentoso Anthony Daniels (C-3PO), el show de rayos laser y la exhibición en el lobby de atuendos y materiales de las seis cintas, hacen de esta experiencia un evento único.
Si bien debo decir que soy fan de la saga, la verdad es que se trata de un espectáculo para cualquier persona, aún para aquellas que no han visto las cintas, ya que la narración de Daniels es lo bastante explícita y universal para capturar a cualquier audiencia. Por si fuera poco, Star Wars in Concert, es acoplado a cada una de las ciudades que visita, con subtítulos en pantalla de lo narrado y el agregado de detalles locales que hacen la delicia de los asistentes.
Para los seguidores de la historia en particular, el suceso resultará inolvidable, se les erizará la piel durante las 14 piezas y valdrá con creces cada centavo que en el inviertan. El evento inicia con la fanfarria de la Fox seguida del tema principal; inmediatamente después el auditorio vibra con Duel of the Fates y de allí arranca la narración de Daniels, que abarca desde la niñez de Anakin hasta el momento en que es redimido por su propio hijo. Algunos números son, gracias a la impecable y fastuosa edición, verdaderas joyas, como la Marcha Imperial, el Tema de Leia o la Caída del Héroe, que muestra la transición de Anakin al lado oscuro. Uno de los números más aplaudidos del espectáculo es, sin duda alguna, el tema de la Cantina.
Dentro los aspectos a destacar de la experiencia, está el percatarse que la saga que inicara en 1977, sigue tan vigente como el primer día, llenando auditorios y creando fans indefinidamente. Por otro lado, varios de los músicos que tocan en la orquesta son precísamente generaciones Star Wars y uno puede apreciar el entusiasmo y la energía con la que tocan, signo inequívoco de que están viviendo su sueño… viajar por el mundo haciendo lo que aman: tocar… y no sólo eso, sino tocar los temas de Star Wars con los que seguramente vibraron de niño y jóvenes. Finalmente, también hay que señalar que el evento no podía estar desprovisto de geeks y fans jurados que incluso asisten ataviados con sus indumentarias jedi y sus sables de luz… algo inevitable en todos y cada uno de los eventos de Star Wars.
En síntesis, la experiencia es ampliamente recomendada para todos, seguidores y no, ya que se trata de un evento multimedia de primer nivel sobre un claro referente cultural, ejecutado con una maestría que pocas veces se puede presenciar.
May the force be with you…