No es una cinta para ganar premios o buscar reconocimientos. Se trata simplemente de un producto emocionante, complaciente, increíble y palomero que hará que muchos salgan deseando patear el balón como Beckham, y que muchas deseen conocer a alguien como él.
Gol 2 es la continuación de Gol, la historia donde Santiago, un chico mexicano emigrado a los Estados Unidos, es cazado por un buscador de talentos del soccer inglés. Allí, el joven se convierte gracias a su milagrosa habilidad, en una de las estrellas del New Castle. En Gol 2, el sueño continua, sólo que el castillo ya no es inglés, sino español. Santiago es fichado por el club más grande del planeta, el Real Madrid.
En este cuento de hadas donde no hay calabazas-carroza sino balones de Champions y donde no hay príncipes sino… —perdón ¿dije que no hay príncipes? Mea culpa— claro que hay príncipes, Rafa Marquez tiene su única toma de gloria y David Beckham es uno de los protagonistas secundarios. Obviamente, la presencia de estos y otros jugadores estelares de Europa, a través de pietaje real de temporadas pasadas, si bien le da credibilidad a la historia, es también un fogonazo de publicidad para la cinta.
En el argumento, el Real Madrid, después de una dolorosa derrota ante su odiado rival, el Barcelona, ficha a Santiago, con la esperanza de encontrar un catalizador en su equipo, ya que Beckham, Zidane, Ronaldo, Roberto Carlos, Owen y Raúl no le son suficientes. Tranquilos, es sólo una película.
El inicio de Santiago es monumental y con ello, la avalancha de gloria, poder, dinero, fama, mujeres y todo el inconmensurable paraíso que sobreviene en estas situaciones, le aplasta inmisericorde. Ya quisiera cualquiera de nosotros una de esas aplastadas.
Encima de ello, problemáticas familiares y un pasado olvidado que resurge de sus cenizas, hacen que el nuevo estrella del Madrid pierda el equilibrio justo en medio de la Champions y entonces…
Para qué contar más. Vale la pena pagar la entrada especialmente si se es fan del soccer o si se tienen hijos que lo sean, ya que se trata de un producto que si bien raya en lo inverosimil, también es una buena inyección de motivación para los deportistas de todas la edades.
Kuno Becker sigue creciendo como actor sin alcanzar la plenitud aún, por lo que todavía Alessandro Nivola y Anna Friel, su amigo y novia en la cinta, le comen mucha cancha.
Hay que señalar que Gol 2 es tan sólo el capítulo intermedio de una trilogía patrocinada por Adidas y que busca, me atrevería a decir, hacer fans en otras latitudes del mundo, especialmente en Norteamérica, donde Beckham pronto irá a patear balones y posar para muchas revistas hollywoodescas.
En fin, una película palomera de fin de semana, con buenas y emotivas tomas de fútbol y claro, la emoción de ver una constelación completa de gladiadores de las canchas realizando jugadas de ensueño.